12/09/2025.- Lágrima tendrá un protocolo más riguroso desde 2026 con sistema participativo de garantía y criterios agroecológicos para reforzar calidad y transparencia.
La Cooperativa de Viver celebra que Lágrima, su AOVE 100% Serrana del Palancia, encabece el palmarés de aceites de la Guía de Vinos y Aceites 2025 de La Semana Vitivinícola, una referencia en el sector que este año ha catado 1.600 vinos y aceites de oliva virgen extra (AOVE) manteniendo su singular clasificación por variedades. Este reconocimiento sitúa de nuevo a la variedad autóctona Serrana y a la comarca del Alto Palancia, particularmente a Viver, en el mapa de la calidad oleícola española, al tiempo que refuerza el valor de un proyecto cooperativo que trabaja con raíces en el territorio.
Lágrima es el aceite premium de la Cooperativa de Viver, un monovarietal 100% Serrana del Palancia, de recolección temprana, extracción en frío en apenas 4 horas desde la recepción de las aceitunas y conservación en atmósfera inerte, por lo que preserva al máximo sus aromas y frescura. Presenta frutado intenso con recuerdos de hierba recién cortada y manzana verde, notas de almendra, higuera y alcachofa, y un equilibrio suave en amargo y picante que lo hace muy versátil en crudo. Es un AOVE gourmet que sintetiza agricultura responsable en el campo y precisión en la almazara.
Compromiso con la calidad y el origen
La Cooperativa de Viver está dando un paso crucial para fortalecer la posición de Lágrima como sinónimo de calidad, transparencia y sostenibilidad. A través de su participación en el programa Sustentta de la Fundación Carasso y con la colaboración de Global Nature, la cooperativa implantará a partir de 2026 un protocolo de elaboración más riguroso para Lágrima, con el objetivo de fortalecer su excelencia y credibilidad en un mercado cada vez más competitivo y exigente.
Para lograrlo, se pondrá en marcha un Sistema Participativo de Garantía (SPG) en el que socios agricultores, técnicos de la cooperativa, agentes del ámbito de consumo y entidades locales certificarán la calidad del AOVE Lágrima con criterios agroecológicos que promuevan un mayor respeto por el territorio. Este enfoque alineado con lo que piden los consumidores (autenticidad, cuidado del medio ambiente y compromiso social) consolida a Lágrima como símbolo de la riqueza agrícola y el patrimonio natural de Viver.
Más allá de un aceite excelente, Lágrima expresa un compromiso colectivo: una comunidad que cuida su ecosistema local y ofrece más valor real a un consumidor cada vez más consciente del origen y de las buenas prácticas que hay detrás de cada producto.
Un liderazgo con valores cooperativos
El liderazgo de Lágrima es inseparable de un modelo cooperativo arraigado a su territorio, que promueve la economía social, gestiona los cultivos con criterios de sostenibilidad, impulsa canales cortos de producción y comercialización y defiende un relato de origen que da identidad a cada botella. Para la Cooperativa de Viver, la calidad es un proyecto común que refuerza territorio y futuro para que Viver y el Alto Palancia sigan vivos.
Tras una campaña 2024 excepcionalmente corta, con 21.000 litros en total y una caída cercana al 80% respecto a 2023, la cooperativa afronta el nuevo curso con mejores perspectivas. La recuperación se alinea con el repunte provincial, si bien el conjunto de Castellón aún quedaría por debajo de un año normal. En este contexto, Paco Ribelles, director del Área Agro de la Cooperativa de Viver, apela a la prudencia y a seguir cuidando el olivar y los tiempos de recolección para consolidar la mejora.
Con el respaldo de SeVi 2025, la cooperativa afronta la nueva campaña con el objetivo de mantener perfiles de alta calidad, reforzar la recolección en el punto óptimo y seguir compartiendo, a través de su tienda y visitas agro-turísticas, aceites de proximidad con nombre y apellidos.